"Un viaje de mil millas comienza con el primer paso"

jueves, 30 de octubre de 2008

La ciudad del amor...

París, además de ser la ciudad del amor es la ciudad de la fusión de lo antiguo y lo moderno, y ¡cómo no! La ciudad de los turistas por excelencia.
Para ver París como es debido debes pasar al menos dos semanas allí, y te aseguro que te faltaría tiempo, sin embargo, si dispones de una agenda apretada como la mia, te propongo la ruta clásica.
Existe una polémica sobre cuál es el monumento más emblemático de París, ¿la Torre Eiffel o el Arco del Triunfo? No seas partidista y ve a visitar los dos!! Partiremos desde el arco del triunfo, situado al final (o al principio, depende como se mire) de los Campos Elíseos.


Si recorres esta gran avenida llegarás a la plaza de la Concordia, muy cerca de
allí está La Madeleine, una iglesia muy particular, ya que su estructura
exterior recuerda más a un templo griego que a una iglesia típica occidental.
Si te gusta comprar y eres adict@ a las marcas caras, ¡esta es tu zona! Cerca de La
Madeleine encontrarás las tiendas más chic de la ciudad. ¡¡Venga, a consumir!!

El otro gran monumento de París es la Torre Eiffel, un monumento de hierro de 324 metros de altura. Fue construido en 1889 para la exposición universal. Si vas a París debes subir a Torre, sí, sí, debes, sino te arrepentirás. Puedes subir a pie (son 1665 escalones, y cansa mucho...), o si lo prefieres puedes subir en ascensor. No sé porque imagino lo que haréis... ¡Por cierto! Comed un crêpe bajo la Torre Eiffel, no os defraudarán! Si os da pereza subir siempre podéis contemplar la mejor vista desde Trocadero.
Otra parada obligatoria es la catedral de Notre Dame, una imponente construcción de estilo gótico, y posiblemente es la obra más representativa de este arte a nivel mundial. ¿No querrás perderte dónde vivía el Jorobado de Notre Dame, verdad?

Para los amantes del arte, París ofrece muchas posibilidades, no sólo de arquitectura, sino también cuenta con numerosos museos reconocidos a nivel mundial. El archiconocido Louvre, con joyas artísticas como La Mona Lisa, La Venus de Milo, o la Victoria de Somotracia. Puedes llegar al Louvre desde la plaza de la Concordia dando un paseo por los jardines de las Tullerias. El Louvre no impone sólo por los tesoros que guarda dentro, el edificio del museo y el patio central son igualmente espectaculares, sobre todo la pirámide de cristal que preside el patio y da la bienvenida a los visitantes. La entrada es gratuita el primer domingo de cada mes.
No podeis olvidar visitar otros museos importantísimos de la ciudad como el Centro Pompidou (su estructura exterior no os dejará indiferentes; simula un edificio industrial, y está recubiertos por tuberias de diferentes tamaños y colores) o el Museo de Orsay (situado en el edificio de la estación de ferrocarriles del mismo nombre).

Para acabar una estancia perfecta en París podéis visitar la Ópera (ópera Garnier), de estilo neobarroco, y comprobar si, en efecto, existe el fantasma que Gastón Leroux imaginó en los pasadizos de la Ópera parisina.

2 comentarios:

Unknown dijo...

No considero que el arco del triunfo o la torre eiffel sean los monumento más emblemáticos...

Basílica del Sacré Cœur, la ópera, Notre Dame, el barrio latino...

París es LA ciudad.

Decé dijo...

Oh venga, no! no! El único emblema de esa ciudad es la gran librería Shakespeare & Co!

(y sin más argumentos)

:D